La idea de nadar con ballenas puede parecer emocionante y única; sin embargo, no es recomendable.
Más allá de esto, tocarlas puede ser extremadamente peligroso tanto para los humanos como para las propias ballenas. A continuación, te explicamos por qué.
Recientemente publicamos un articulo titulado «Salvada por una ballena» donde puedes ver como una enorme ballena jorobada protege a la bióloga marina Nan Hauser de un supuesto tiburon tigre.
Aunque no estamos seguros de que fué lo que sucedio allí, hay muchas historias en línea que analizan lo sucedido.
Sin embargo, en este caso, nos gustaría enfocarnos en otro aspecto del video. ¿ Es correcto tocar a una ballena e interactuar con ella ? ¿ Nadar con ballenas y tocarlas puede ser muy peligroso ?
Normalmente es dificil para las personas mantener la distancia de la criaturas marinas durante su primer buceo y evitar tocarlas.
Porsupuesto, es muy tentador, especialmente cuando tus amigos quieren tomar fotos de recuerdo.
Sin embargo, es importante para los buzos entender que tocar mamíferos marinos acarrea consecuencias para ambas especies, la humana y el animal.
Nadar con ballenas, no es una buena idea.
Te compartimos 5 razones de porque nadar con ballenas y tocarlas no es recomendable y puede ser muy peligroso.
1. Puedes herirte o enfermarte
Si bien puede ser emocionante conocer de cerca a estos enormes mamíferos marinos, es esencial recordar que las ballenas son animales salvajes y su comportamiento puede ser impredecible.
Pueden causar daño a los humanos sin darse cuenta o cuando se sienten amenazados. Por ejemplo, la poderosa cola de una ballena jorobada puede asestar un golpe lo suficientemente fuerte como para herir o incluso matar a una persona.
Morder y arañar son otras formas de defensa o comunicación en el mundo de las ballenas, y el contacto involuntario puede provocar lesiones graves, incluidos cortes profundos y hematomas.
Además, la proximidad a las ballenas puede exponer a los humanos a enfermedades. Las ballenas pueden ser portadoras de diversos patógenos y parásitos que pueden ser perjudiciales para los humanos.
La brucelosis, la tuberculosis y la leptospirosis son algunas de las enfermedades que se han asociado con los mamíferos marinos.
Estas enfermedades pueden transmitirse a través del contacto con secreciones corporales, como la saliva y la orina. Incluso si la ballena parece sana, no hay forma de garantizar que no porte agentes infecciosos que podrían dañar a los humanos.
2. Los humanos pueden portar enfermedades
Más allá del riesgo de contraer enfermedades de las ballenas, existe otro problema de salud relacionado con la interacción humana con la vida marina.
Muchos buceadores y practicantes de snorkel utilizan protectores solares cuando pasan tiempo en el agua.
Estos protectores solares, si bien son útiles para proteger la piel humana de los rayos dañinos del sol, pueden contener sustancias químicas dañinas para la vida marina, incluidos los corales.
Cuando los nadadores tocan o entran en contacto con animales marinos, estas sustancias químicas pueden transferirse a las criaturas, provocando posibles daños.
Para mitigar este problema, es fundamental que los buceadores y practicantes de snorkel elijan protectores solares con filtros minerales que sean menos dañinos para el medio ambiente.
Al ser conscientes de los productos que utilizan y sus interacciones con la vida marina, las personas pueden contribuir a la preservación de los arrecifes de coral y otros ecosistemas delicados.
3. Su gran tamaño
Las ballenas se encuentran entre las criaturas más grandes de la Tierra; algunas especies pesan hasta 200 toneladas y miden hasta 100 pies de largo.
Nadar con animales tan enormes puede resultar intimidante y su gran tamaño supone un peligro importante. El contacto accidental con el cuerpo o los apéndices de una ballena, como sus aletas o aletas, puede provocar lesiones graves, incluidas fracturas de huesos y lesiones internas.
Es fundamental tener precaución y mantener una distancia segura para evitar accidentes potencialmente mortales.
El peso de una ballena por sí solo puede ser peligroso si aterriza o choca con un humano.
Dada la imprevisibilidad de sus movimientos, es aconsejable admirar a estas criaturas desde lejos para garantizar su seguridad.
4. Podrías estar tocando sus crías.
Acercarse a las ballenas, especialmente a sus crías, no sólo es peligroso sino también éticamente cuestionable. Las ballenas, como muchas otras especies del reino animal, tienen fuertes instintos paternos.
Cuando los humanos se acercan demasiado a sus crías, incluso con buenas intenciones, pueden percibirlo como una amenaza, lo que desencadena conductas defensivas por parte de la madre.
Estos comportamientos protectores pueden incluir atacar a los intrusos, darles palmadas en la cola o incluso acciones más agresivas.
En este contexto, lo que podría parecer una interacción inofensiva para los humanos podría interpretarse como una amenaza por parte de la ballena, dando lugar a enfrentamientos potencialmente peligrosos.
Es fundamental respetar los límites de estas unidades familiares y observarlas desde una distancia segura para garantizar tanto su seguridad como el bienestar de las ballenas.
5. Nadar con ballenas podría estresarlas
Nadar con ballenas o tocarlas afecta su comportamiento natural. Esto puede causar grandes cantidades de stress en algunas ballenas, potencialmente poniendo la vida del buzo en peligro.
Algunas ballenas experimentan menos estrés o están más acostumbradas a los humanos. Sin embargo, es mejor mantener la distancia de estos animale marinos y no tocarlos.
Recuerda, eres solamente un huésped en su casa. Piénsalo de esta forma, si las cosas fueran alrevés: Como te sentirías si un grupo de extraños caminara alrededor de tu sala mientras almuerzas o te reúnes con tus amigos.
Por todas estas razones, disfruta del placer de observar las maravillas del mar! y no dudes en tomar fotos hermosas!
Si eres buzo, tienes la responsabilidad de preservar la vida marina para las próximas generaciones. Por ende, mantén esto en mente, que una pequeña falta de cuidado aparentemente sin importancia, puede ser faltal para la naturaleza y muchas veces para nosotros como personas.
El video de una bióloga nadando con ballenas
Ahora sabes que nadar con ballenas puede ser peligroso, tanto para tu persona como para ellas.
Nos gustaría que puedas mirar nuevamente el video de la bióloga Nan Hauser nadando con una ballena jorobada. Intenta identificar los peligros potenciales mencionados anteriormente.
Preguntas frecuentes respecto a nadar con ballenas
Accidentes al nadar con ballenas jorobadas.
En agosto 2021 se recibieron diferentes reportes de tres personas heridas por encuentros cercanos con ballenas jorobadas en la costa oeste de Australia.
Los accidentes sucedieron durante unos tours de Snorkel en Ningaloo Reef, cuando los visitantes se acercaron demasiado a una madre con su cría.
En el 2020 una joven de veintinueve años resultó herida y tuvo que ser llevada a un hospital. La misma resultó herida mientras nadaba en el área del arrecife de Ningaloo, en la costa de Australia Occidental.
La mujer fué golpeada por la cola de una ballena jorobada.
Nadar con ballenas jorobadas es permitido en Australia, así como en otros países. Algunas agencias organizan tours específicamente para nadar con las ballenas jorobadas.
Sin embargo, los accidentes ocurridos en el 2020 en este país han levantado las alarmas.
Efecto de interactuar con las ballenas
Además de los riesgos físicos y sanitarios, es importante pensar en cómo nuestra presencia puede afectar a las ballenas. Diversos estudios han demostrado que la constante llegada de embarcaciones turísticas puede alterar su comportamiento natural.
Un claro ejemplo de esto ocurre en Tahití, donde el aumento del turismo de avistamiento ha generado preocupación entre los expertos, ya que interfiere con la vida de las ballenas jorobadas, afectando su salud y sus hábitos.
Estos cambios pueden influir en su comunicación, alimentación e incluso en sus rutas migratorias, poniendo en riesgo su bienestar a largo plazo. Un estudio publicado en Ecology and Society resalta la importancia de monitorear estos efectos para mitigar su impacto y garantizar la conservación de estos cetáceos.
Por eso, es clave que estas actividades se realicen de manera responsable, manteniendo la distancia adecuada y reduciendo cualquier impacto negativo para asegurar su conservación.
Mantener la distancia es una buena idea
La interacción con animales salvajes es un riesgo, especialmente cuando el animal se encuentra en su entorno natural, como el mar abierto.
Los animales salvajes, incluyendo las ballenas, pueden mostrar comportamientos impredecibles.
Algunos movimientos como los saltos fuera del agua y los aletazos representan un riesgo importante para los nadadores y los observadores de ballenas que no guardan suficiente distancia.
Recientemente se realizó un estudio para determinar el impacto de la presencia de nadadores cercanos a las ballenas jorobadas. El estudio se realizó en la isla Reunión, ubicada en el océano indico.
El resultado del estudio demostró un comportamiento más agresivo en los grupos de animales cuando los nadadores se acercaban a ellos.
Los golpes de las aletas y los movimientos agresivos de las ballenas jorobadas se incrementaron, especialmente en las madres que nadaban con sus crias.
El Impacto de las Interacciones Humanas en el Bienestar de las Ballenas
Es importante tener en cuenta que interactuar de manera inapropiada con las ballenas puede afectar su comportamiento y bienestar. Según estudios de la NOAA, las interacciones humanas no controladas pueden generarles estrés, alterando su alimentación, descanso y reproducción.
Cuando las ballenas sienten que están siendo acosadas, pueden cambiar su ruta migratoria, reducir el tiempo que descansan e incluso modificar su manera de comunicarse.
Esto puede impactar negativamente en su salud y en la supervivencia de sus crías. Por eso, es vital observarlas de manera responsable, manteniendo siempre una distancia adecuada y respetando su espacio.
Al seguir estas pautas, no solo cuidamos a las ballenas, sino que también garantizamos que otras personas puedan disfrutar de la magia de estos encuentros en el futuro, de forma sostenible y respetuosa.
Recomendaciones para un avistamiento seguro
- Conozca las normas que rigen las embarcaciones.
- No intente dispersar los grupos de ballenas.
- No dé de comer a los animales ni arroje desperdicios o basura al océano.
- Si está nadando y se encuentra una ballena, hágalo a más de 30 metros o más. Trate de alejarse lo antes posible.
- Mire hacia el mar y esté atento a los soplos o movimientos de las ballenas
¿Qué ballenas puedes ver en Costa Rica?
Costa Rica es el hogar de una amplia gama de especies de ballenas. Las ballenas más comúnmente avistadas en Costa Rica incluyen:
¿Dónde y cuándo ver ballenas?
Es importante tener en cuenta que los avistamientos de ballenas pueden variar según la época del año. Los patrones de migración y las ubicaciones específicas dentro de Costa Rica.
El país ofrece varios tours de avistamiento de ballenas y paseos en bote, especialmente en áreas como el Pacífico Sur (Uvita, Bahía Drake) y la Península de Nicoya (Golfo de Papagayo, Santa Teresa), donde tienes más posibilidades de encontrarte con estas majestuosas criaturas.
Mirar ballenas en Costa Rica
Si te gustaría ver e incluso acercarte a una distancia segura de estas gigantes de la naturaleza, las ballenas jorobadas, debes planear una visita a Bahía ballena en Costa Rica.
El Centro de buceo Costa Rica Dive and Shop organiza un tour de avistamiento muy interesante y divertido para mirar ballenas.
Puedes estar seguro que estas en las manos correctas, pues acatámos todas las medidas de seguridad y políticas necesarias para cuidar el mundo marino y a las personas que lo observan.
Contáctanos hoy y permites llevarte a experimentar este increíble mundo natural !