Los microplásticos. Este es un tema que tal vez sea muy poco difundido en general, pero no por eso deja de ser de real importancia en el desarrollo vital de nuestro planeta.
Hoy en día es muy importante estar al tanto de las cuestiones que hacen al cuidado de nuestro medio ambiente y tener conocimiento sobre los microplásticos nos ayudará a tomar medidas que nos ayuden a contribuir con el cuidado de nuestro hábitat.
Los microplásticos son pequeñísimas piezas de plástico que llegan a tener un tamaño de entre cinco milímetros y unos imperceptibles cientos de nanómetros de largo (un hilo de cabello puede llegar a medir unas 70 veces más en grosor).
Los plásticos de tamaño nanométrico pueden pasar a través de las membranas celulares.
Prácticamente estos elementos se hallan diseminados en todos los rincones del planeta, desde la arena de cualquier playa del mundo hasta las zonas glaciales en los hielos marinos, desde la superficie terrestre hasta el espacio aéreo de nuestra atmósfera.
Y por supuesto, también se hallan diseminados por todo el océano.
Esta afirmación está sustentada en estudios realizados que muestran que al menos un 80% de arena de las playas del mundo concentran microplásticos en ellas.
Podemos afirmar que absolutamente todos los seres vivos pueden ingerir plástico, por ejemplo, lo pueden confundir con alimento, o por su característica de adherencia, puede estar presente en su fuente misma de alimento.
Especialmente los peces y animales acuáticos.
¿Cómo se originan los microplásticos?
Esta es una pregunta muy importante de responder. Algunas fuentes de origen de microplásticos son:
Objetos de plástico en forma de desechos: obviamente, los microplásticos no se originan como tales.
Primeramente, resultan de un acto de desecho como objeto de plástico o escombro que se va degradando o descomponiendo en trozos más pequeños.
Esa descomposición normalmente es causada por ciertos factores, tales como: las corrientes acuáticas, la luz solar y el desgaste por la fricción con rocas o arena.
El mayor porcentaje del plástico que se encuentra en el océano viaja a través de las corrientes desde la superficie de la tierra, o sea, no precisamente éstos se vierten desde una embarcación en navegación, aunque también es un factor, pero en menor escala.
Estos residuos recorren las corrientes marinas y llegan a las playas y océanos, también con la lluvia y el viento.
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Ropa de confección sintética
Otro factor de origen se da con el aumento de la moda rápida, que recurre a la fabricación de bajo costo, que implica el proceso sintético y esto causa un gran problema generando microplásticos.
El plástico que es componente de esa ropa se va soltando en microfibras con cada lavado en la máquina.
Se vio que en tan solo un lavado de ropa se puede producir más de 700,000 fibras microplásticas que llegan a las fuentes de agua a través de las descargas.
Componentes plásticos de productos de salud y estética
también se les da el nombre de microesferas, son piezas de plástico de polietileno utilizados como exfoliantes de productos de salud y belleza, contenidos en limpiadores, pastas dentales, exfoliantes faciales y otros.
En las filtraciones de agua llegan a las fuentes marinas. El uso de estos productos fue prohibido recientemente en algunos países. En EE. UU., desde el 2021 rige la Ley de Aguas Libres de Microesferas.
Contenedores perdidos
un fenómeno que se da es que también los buques de carga pierden contenedores durante los traslados.
Se calcula por año, la pérdida de entre 1,000 y 100,000 contenedores en altamar y estos al romperse con contenido de elementos de plástico, estos quedan en el océano y se genera la degradación al estado de microplásticos.
Desgaste de los neumáticos
Los vehículos conducidos de tracción terrestre hacen fricción en las rutas produciendo el desgaste y en consecuencia esparcen partículas microplásticas en el aire y el suelo.
A estas partículas las lleva el viento y las arrastran las aguas de lluvia, terminando en el océano.
En un informe científico se ha estimado que alrededor del 30% del volumen de microplásticos en fuentes acuáticas proviene del desgaste de los neumáticos.
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¿Cuáles son los impactos causados por los microplásticos?
El plástico en sí no es el único elemento contaminante. Estos aparte llevan aditivos que se suman al contenido de plástico durante el proceso de producción para darle características especiales como rigidez, dureza, color, etc.
Pueden ser pigmentos, estabilizadores ultravioletas, repelentes de agua, retardantes de llama, endurecedores como el bisfenol A y suavizantes llamados ftalatos.
Estos aditivos contienen sustancias peligrosas y son liberados en el proceso de degradación del plástico o por transferencia del plástico al material que contiene.
Los microplásticos pueden causar problemas en el tracto digestivo, causando desórdenes de alimentación y reproducción y en el crecimiento y la salud de casi todos los seres vivos.
El zooplancton es una fuente alimenticia importante para muchos animales como peces y cetáceos.
Sin embargo, cuando estas especies más grandes ingieren accidentalmente microplásticos, se manifiestan estos problemas. La cadena alimentaria se ve afectada profundamente por este suceso como así también la biodiversidad en todo el mundo.
Asimismo, se ha identificado que las concentraciones significativas de microplásticos pueden alterar la función del sistema endocrino causando alteraciones en el metabolismo energético tanto en las especies animales como en el ser humano.
También producen cambios en la fisiología hepática. Pueden afectar el desarrollo fetal y aun el crecimiento de los niños. Pueden causar cáncer y otras patologías. Con las investigaciones que siguen en pie se van descubriendo efectos que siguen causando, tanto al medio ambiente como a los seres vivos.
¿Cómo podemos actuar en relación a los microplásticos?
Tomar conciencia
Debemos tomar conciencia sobre las consecuencias negativas de los microplásticos y acordar como ciudadanos el rechazo a la industria del plástico.
Dando también apoyo a las Organizaciones que luchan contra la contaminación con estos materiales, apoyando también los esfuerzos de conservación marina.
También podemos ejercer nuestro derecho ciudadano exigiendo a las instituciones gubernamentales. Que legislen a favor de la protección del medio ambiente.
Exigir a las instituciones
Las instituciones deben ejercer el control correspondiente para su estricto cumplimiento.
Desalentar la producción de alimentos envasados en plásticos, presionando a las empresas a que hagan cambios radicales e impactantes.
La mencionada industria de “moda rápida” también debe disminuir con la presión de los consumidores. Deben alentar la producción de prendas hechas de materiales orgánicos como el algodón o el lino.
Para ello, es clave que la compra se haga sobre productos sostenibles, descartando líneas de producción débiles en el compromiso con el cuidado del medio ambiente.
En cuanto a usos cosméticos y de cuidado de la piel, es mejor buscar productos que sean naturales y que no contengan micropartículas. En el mercado existen muchas alternativas.
Regresar a elementos reutilizables
Es importante que regresemos nuevamente al uso de elementos reutilizables en sustitución a los elementos descartables.
Por ejemplo, las botellas no plásticas en lugar de las plásticas descartables. Tazas reutilizables no plásticas para el café o té y conservar las bolsas reutilizables en la casa o en el trabajo.
No arrojar desperdicios
No arrojar desperdicios a las calles. Casi un tercio de los envases de plástico utilizados en todo el mundo se convierten en basura que termina ensuciando las calles de las ciudades, atascando los sistemas de alcantarillado. Muchos van a parar a ríos y océanos.
Un consumidor informado es un consumidor que puede decidir combatir el problema de los microplásticos.
¡Gastar dinero en productos que no contribuyen al problema del plástico hace una gran diferencia!
